lunes, 5 de setiembre de 2011

TIEMPO DE PERDERME DE TU MANO


Ayer vino a visitarme un amigo y la verdad me movió un poco el piso. No es que me guste o que yo le guste. Aunque nos hemos confesado que siempre hubo una vibra diferente entre los dos, las últimas veces que lo he visto no me ha hecho sentir nada distinto a lo que me hace sentir cualquier otro amigo. Y tampoco me movió el piso porque haya pasado algo, porque no paso nada, ni medio beso. Es solo que mientras veíamos una película me agarró de la mano. 

Fue algo de amigos, no fue nada romántico, ni el inicio de un intento de algo. Sólo estábamos ahí sentados tomados de la mano. Me gusto estar así, no necesariamente por que fuera P. (me gustan mas otras manos) sino porque era situación tan relajada. No hubieron preguntas al respecto. Nadie me preguntó hasta que punto estaba bien estar así, ni me preguntaron si eso me confundía, Sólo estábamos ahí.

Toda ese escena, me hizo pensar en que tal vez es momento de soltar manos confundidas. Tal vez sea momento de buscar manos que no quieran soltar las mías. Tal vez no.

2 comentarios:

Javier Cáceres Paurinotto dijo...

El último párrafo lo es todo. Genial!

Lilysan dijo...

Concuerdo con mi comentarista antecesor... Quizá sea tiempo no? pero que difícil es poner en práctica la teoría... :/