viernes, 7 de setiembre de 2012

1,2,3 ...YA!!!

Hay decisiones complicadas. Decisiones que son como depilarse las piernas con cera. Una vez que la esparces por tu piel no hay vuelta atrás. Solo queda apretar los ojos y jalar la tirita.

Hacerse la cera es para valientes. Yo no soy tan valiente.

Y es así, o lo haces o lo haces. Yo estoy apunto de jalar la tirita. Ya calenté la cera, espere que este a la temperatura adecuada limpie la piel donde la aplique, le puse talco y esparcí la cera. Pero ahora estoy congelada pensando: "Mierda, como me va doler esto"

El tema es que sé que tengo que hacer, sé que es lo mejor. Sé que es momento de abrir la mano y dejar ir algunas cosas. Pero no puedo, sigo buscando razones para no soltar. Es mas, mientras mas quiero soltar, menos quiero soltar (Hummmm tengo mi propia paradoja).

El caso es que ya no hay mas razones para quedarme, es mas tampoco quiero quedarme, pero seria mas fácil si te vas tú.


jueves, 7 de junio de 2012

AUNQUE SUENE A PAPÁ ABUSIVO







ESTAR EN BITCH MODE
ME DUELE MAS A MÍ QUE A TI










...Mientras mas mala onda mas me duele

miércoles, 6 de junio de 2012

QUÉ PENA TU CARA

Siempre me pareció gracioso lo fácil que se ven las cosas en las novelas. Por ejemplo, una peluca y nos lentes oscuros te convierten en una persona tan distinta que nadie, ni si quiera el esposo que abandonaste por borracho y con el que tuviste 4 hijos te puede reconocer (Hoy vi María Mercedes).

En la vida real no es tan fácil. Ok, no es común que uno vaya por ahí de incógnito usando una peluca para esconderse. Lo que si es común es que escondamos lo que nos pasa. Siempre y cuando nos pase algo malo. Porque es así, escondemos el polvo bajo la alfombra para que nadie sepa que lloramos, que estamos dolidos o que nuestra vida no es nada parecido a lo que soñábamos de chicos. Pero nos encanta salir con una sonrisa de oreja a oreja y demostrarle a todo el mundo que somos felices, que tenemos todo lo que queremos y que somos exitosos, aun que por dentro nuestro estado anímico penda de un hilo.

Sonreír cuando solo quiero llorar es un arte que pense que había dominado (And the Oscar goes to....not me).

El otro día vi a P. No paso mucho tiempo para que me diga lo decaída que me veía, lo evidente que era mi inconformidad con la vida. Me dijo que tenia mirada triste. "No pasa nada, no estoy triste" era lo único que podía decir mientras sonreía (con mi sonrisa también triste).

Ojala hubieran lentes oscuros que escondan la tristeza , pelucas que te hagan ver feliz o maquillaje que camufle la inconformidad. Pero la tristeza es mas que una emoción, es una actitud y nada la pude esconder. Puedes puedes sonreír con tu sonrisa mas amplia, gritar a los 4 vientos que estas bien, que no pasa nada, puedes mentir, actuar y fingir, pero en verdad, no engañas a nadie.

lunes, 4 de junio de 2012

NO HAY TAL CRISIS

Una dice no hay tal crisis, mientras tira un par de platos al piso… Una dice no hay tal crisis, y se ríe con su mejor cara de estúpida… Una dice no hay tal crisis, y saca cita en la peluquería… No hay tal crisis, y te pones kilos de tapa ojeras…

Una vez que aceptas que la crisis es tal crisis, estás preparado, ya puedes negar la crisis.

Una dice no hay tal crisis, y rompe lo que tiene a mano… Una dice no hay tal crisis, y come chocolates como loca… Una pone su mejor cara de estúpida y dice: no hay tal crisis. Pero tarde o temprano llega el día donde la crisis tiene la evidencia de una estría y no queda otra, hay que aceptarla.

Se puede negar la crisis un día, un mes, un año, pero llega ese día en que la crisis te explota en la cara.

Atravesar la crisis es como pasar el pelo por agua oxigenada, te aclara el pelo de raíz. Llega la crisis, uno cree que es el final, que se termina todo, pero en realidad ahí empieza todo. Atravesar una crisis es como pasar por un buen cirujano plástico, eres la misma pero distinta. Dan miedo las crisis. Uno le teme a lo desconocido, casi como a un mal peluquero.

En chino, en japonés, en coreano, en tailandés...bueno, en algún idioma oriental, crisis significa oportunidad. Y eso ahorita me da igual.

martes, 29 de mayo de 2012

CALMA...TODO ESTÁ EN CALMA

Nada asusta tanto como el silencio que antecede a las tormentas o a la retirada del mar antes de un Tsunami. Uno sientes esa paz extraña, fingida. Como si la vida se burlara. Como si la realidad te dijera: Esto te gusta? Si, no? Bueno, ni te acostumbres porque está por armarse la gorda.

Odio el silencio que antecede a las tormentas. Odio la retirada del mar antes del Tsunami. Odio tener el alma adormecida. Odio saber que la crisis me pisa los talones. Odio caminar al borde del abismo en puntas de pie.

Si viene la tormenta, que venga. Y que me agarre en medio de la calle, sin paraguas y con poca ropa.

lunes, 28 de mayo de 2012

EL MAL DE LA ÉPOCA

El mal de la época no es ni el hambre ni la pobreza. Tampoco la violencia ni las guerras.

En todos lados hay angustia y depresión, pero tampoco esto es el mal de la época. A mayor tecnología, mayor incomunicación. La incomunicación es un serio problema, pero tampoco es el mal de la época.

La ciencia avanza en la lucha contra las enfermedades, pero nuevas plagas y virus siempre van un paso más adelante; sin embargo, esto tampoco es el mal de la época.

Hambre, pobreza, violencia, agresión, angustia, depresión, la incomunicación, enfermedades, plagas…son todos hijos del verdadero mal de la época, la soledad. Y saber esto, es donde radica nuestro poder.

Nietzsche dijo; para vivir solo uno tiene que ser un animal o un Dios. No es bueno que el hombre este solo dicen que dijo Dios. La soledad es mala consejera decían los viejos. Acompañado todo es más fácil; sin embargo los hombres le escapan al compromiso de unirse unos a otros. Nadie quiere la soledad sin embargo todos tienden a la soledad.

No estar solo requiere un esfuerzo que muy pocos hacen. Se paga un precio muy alto por estar solo. El aislamiento te vuelve débil, frágil y a veces por no estar solo terminamos solos. Por eso la soledad es el verdadero mal de la época.

martes, 3 de abril de 2012

MOMENTO KODAK


El tiempo se va tan lentamente para los que esperan. Pero, ¿Se va adonde? ¿Qué hará el tiempo con nosotros? ¿Que hará con nuestro futuro?. ¿El futuro nos traerá amor y felicidad o soledad y tristeza? ¿El futuro nos llevara por un camino o por otro? ¿Nuestra alma logrará salvarse o será corrompida?. Luchar por los sueños ¿Tiene sentido? ¿El futuro romperá nuestros sueños como un cristal? ¿El futuro nos cobrará nuestros crímenes o el futuro nos dará la oportunidad de redimirnos? ¿Habrá el merecido final feliz? ¿Habrá desolación y tristeza? ¿Triunfará el bien? ¿Triunfara el mal? 

El tiempo se va lentamente...¿Hacia dónde? 

Sacamos fotos para congelar el tiempo, para que no se vaya, pero el tiempo se va lentamente. Nos encantan las fotos, nos encanta el tiempo congelado. A quién no le gustaría una foto del futuro ¿no?. El futuro que imaginamos, nuestros deseos, son ensayos del futuro; nuestros deseos son fotos del futuro.

A veces el futuro nos hace un guiño, nos deja espiarlo, robarle una foto, como si fuéramos paparazzis del destino. Es más fácil pensar que hay un destino escrito, que simplemente avanzamos hacia él, pero el futuro es volátil, una simple decisión, y todo cambia. Un error, un traspié, una acción, una omisión, y las fotos del futuro cambian. 

Las fotos del futuro son imprecisas. El pasado no se puede cambiar, el presente esta ocurriendo, pero el futuro…el futuro cambia cada instante. Queremos correr contra el tiempo, anticiparnos, detenerlo, pero es una perdida de tiempo ¿no?Lo que hacemos o lo que no hacemos va moldeando el futuro. Un segundo antes y tenies un final feliz; un segundo después y todo cambia.

El futuro es una foto que cambia constantemente. Al futuro no se le puede sacar fotos, porque cambia todo el tiempo. Hoy tiene una cara, mañana otra. Hoy está…y mañana no está.”

domingo, 15 de enero de 2012

SACA TU CEREZA DE MI HELADO


Ella descubrió que caminar sin compañía era mejor. Descubrió que realmente nadie se preocupa por nadie, a nadie le importa nadie. A ti tampoco te debería importar nadie; le dice el humo del cigarro que decidió prender intentando calmarse.

Hoy le importa poco matar con la boca. No mide la magnitud de sus palabras, de cualquier manera siente que habla con una pared. Seguramente esas palabras duras que vomita calen más profundo que las esas palabras bañadas en miel que se cansó de soltar, pero ya está. A veces no se logra nada, ni a las buenas ni a las malas.

Piensa tanto en esa frasecita que le soltaron no hace mucho:   "acércate a los que te ayuden a crecer y aléjate de los que te traten de bajar". En ese momento la frase le dolió. Fue como una cachetada. Hoy tiene un tinte de consejito barato.


Pero luego se pone a pensar. ¿Quién te ayuda a crecer? Al final todas las personas a las que  conoce la jalan un poco para abajo. La tiran de vez en cuando al piso. Y aun que la mayoría de las veces no le importe hoy le duele la indiferencia de otros. Le duelen las heridas las manos y las marcas de uñas en el brazo. Ésta vez está harta de atragantarse con las cerezas de los demás.