Y SI...

Mi mente pasa por una fase de sequía, vacas flacas y sin inspiración. Entro todos los días a mi blog con la idea de escribir algo, busco palabras en la pantalla, en el teclado, en el techo. Nada suena bien, nada rima, nada expresa lo que quiero decir.

Tantas cosas me han pasado que no puedo (o no quiero) centrarme en una sola y soltar el millón de cosas que tengo que decir. Tanto sentimiento reprimido, tanta cosa sin sentido, tantas situaciones tan poco compatibles conmigo y tan mías a la vez.

Quiero soltar todo y no puedo, quiero gritar, decirte que te quiero y gritar que te odio también. Aceptar que hice cosas que no debía, que dije cosas que debí callar y calle cosas que debí gritar. Me quedo con las ganas de sentarme a tu lado y abrazarte, me quedo con las ganas de hilar palabras coherentes, me quedo con la sensación de no escribir algo con sentido, me quedo en mi cama hasta mañana.