miércoles, 19 de enero de 2011

DONDE VIVEN LOS MONSTRUOS

En estos días he aprendido que los monstruos no viven debajo de tu cama, no se esconden en el armario o viven en los bosques. Los monstruos más grandes, crueles y espantosos viven en nosotros. Son ellos lo que nos llenan de dudas, los que nos hacen ver las cosas más complicadas de lo que quisiéramos, los que nos hacen atravesar noches negrisimas sólo para divertirse.

Yo conocí a mis monstruos pero no los cacé. En cambio firmamos un acuerdo de convivencia pacífica. Ellos me mantendrían a raya cuando sea necesario y a cambio yo los alimentaría de cuando en cuando. Al parecer ellos no respetaron el acuerdo. No hicieron su trabajo como debieron y se dedicaron a comer. A alimentarse con cualquier cosa. Fueron tan inteligentes que lograron que los alimente sin que me dé cuenta. Debí cazarlos.

Hace unos días mis monstruos salieron. Ahora corren por ahí tirando todo lo que un día pude construir. Llevándome de la pena a la culpa a la velocidad de la luz. Quitándome el sueño, levantándome en la madrugada (como a la pobre Pepa). Dejándome con ánimos para muy pocas cosas y creo que se metieron en mi barriga porque ahora solo hay espacio para una sola comida al día.

El domingo decidí que la convivencia pacífica había terminado. El lunes salí a cazarlos.

1 comentario:

Juanito el caminante dijo...

Trata de entender que son parte de ti ah... los mountruos desaparecen si los atacas pero matalos en one...

Y no dejes de caminar...